Pimienta de Sichuan

Como ya habéis visto, hemos decidido traer la pimienta de Sichuan a nuestra tienda. Y es que es esta una pimienta muy especial con virtudes importantes que nos ofrecen grandes posibilidades a la hora de emplearla, tal y como vamos a intentar explicaros en las próximas líneas.

Qué es la pimienta de Sichuan - Sìchuān huājiāo

Ya casi todos conocemos las pimientas más habituales y que en mayor o menor medida hemos ido usando o nos hemos encontrado: pimienta negra, pimienta blanca y verde, pimienta rosa, pimienta de Jamaica… pero, un momento, ¿todas estas son pimientas?.

Pues no, la pimienta rosa o roja, por ejemplo, no es realmente una pimienta, sino una baya procedente del árbol “schinus molle”. La confusión procede, como ya hemos dicho alguna vez, del error de creer los españoles que realmente habían llegado, dando la vuelta a la tierra, a las Indias, en lugar de a un nuevo continente, Sudamérica.

Algo similar ocurre con la pimienta de Jamaica, llamada así por el mismo motivo. De hecho, la pimienta de Jamaica en el mundo anglosajón se llama “allspice”, y hace referencia a que su complejo sabor recuerda a una mezcla de otras especias: clavo, nuez moscada, canela, pimienta...

Pues bien, con la pimienta de Sichuan ocurre algo parecido. Si limitamos el nombre “pimienta” (pepper) a las bayas del Pipper Nigrum, obviamente, no es una pimienta. Y además, como veremos más adelante, tampoco se puede decir realmente que sea picante.

La pimienta de Sichuan (Szechuan pepper) es el fruto del árbol Zanthoxylum (xanthoxylum peperitum). Originaria de esa región de China, se ha usado desde muy antiguo tanto en la gastronomía como en la medicina oriental.

¿La pimienta de Sichuan viene abierta o rota?

A la hora de comprarla o usarla, debemos saber que lo que realmente vamos a adquirir o emplear es la cáscara o vaina de la semilla. Esto se debe a que la semilla es de textura arenosa y más bien desagradable (como si mordiésemos tierra), mientras que es en la cáscara donde se concentran todos los aceites y aromas esenciales que la hacen única y le proporcionan sus características.

¿A qué sabe?

Como siempre, para conocer una especia, os recomendamos que hagáis algo tan sencillo como meteros un grano en la boca y lo mastiquéis y saboreeis para familiariarizaros con su sabor.

La primera sorpresa es que la pimienta de Sichuan no pica. Al menos no a lo que se entiende por picor o a lo que solemos estar acostumbrados. Percibiremos que su sabor es muy aromático e intenso, quizás ligeramente alimonado y la sensación inicial es similar a la que produce el clavo si lo masticamos, aunque más suave. Además, a los pocos segundos de masticarlo notaremos cierto hormigueo y un ligero adormecimiento en la lengua (entumecimiento picante o malá -en chino-).

A la vez, una de las características más interesantes es que actua como un potenciador natural realzando los sabores del plato que estamos comiendo.

En éste link podéis encontrar una recopilación de las mejores recetas con pimienta de Sichuan:

https://www.olivemagazine.com/guides/best-ever/best-szechuan-recipes/

Nosotros, personalmente, recomendamos los Dan Dan noodles, deliciosos y adictivos.

Idea de uso:

Más que una receta, esto es una sugerencia o propuesta: se pone a calentar miel (cantidad suficiente para hacer una salsa) sin llegar a hervir y se añade la pimienta. Cuando esté a punto de hervir se apaga y se deja enfriar unos 30 minutos. Después se cuela y se puede echar esta salsa sobre pollo frito o cordero asado. También le va muy bien a unas costillas asadas.